Impresión transfer

Proceso desarrollado originalmente en la Inglaterra georgiana para su uso en cerámica. Los primeros ejemplos de estampación en caliente datan de la década de 1960. Este proceso de impresión se utilizó para crear carteles políticos y ropa para los activistas durante la guerra de Vietnam. La transferencia de calor formó parte principalmente de la industria de la moda, pero también se utilizó para vajillas, puzzles y muchos otros productos.

La impresión por transferencia utiliza un papel especial recubierto de teflón que soporta altas temperaturas. El reverso del papel está recubierto de fuertes adhesivos que se adhieren al producto sin desgastarse ni rasgarse. Se utilizan grandes máquinas industriales, o prensas térmicas, para transferir el diseño del papel al producto.

Las plantillas digitales han abierto las posibilidades de este proceso de impresión, haciéndolo más accesible que nunca. Es una forma interesante de añadir un diseño o logotipo personalizado a sus regalos publicitarios.

Pro

• Una técnica limpia y segura para el medio ambiente;
• Utiliza tintas especiales que garantizan un producto acabado de alta calidad;
• Permite tiradas pequeñas a precios bajos;
• Adecuado para una gran variedad de colores, con gráficos fácilmente modificables mediante software especializado.

Contra

• No es adecuado para grandes cantidades, ya que el proceso resulta más caro y requiere más tiempo;
• Los estampados pueden desteñir tras varios lavados y no duran mucho;
• Los estampados son rígidos y pueden hacer que el tejido sea rígido y menos cómodo;
• Planchar las impresiones estropeará la imagen.

En definitiva, la estampación en caliente sigue siendo un buen método si desea imprimir un número limitado de artículos, ya que ofrece un alto nivel de detalle a bajo coste.